lunes, 26 de abril de 2010

Bolero a distancia

De bobo te digo, me encanta como besas.

Te recuerdo bien, robándome el aire y yo algo mareado, bailando los dos cualquier letra imbécil cantada en nuestra tierra. Bailábamos más, pero nosotros dos.
Recuerdo como contrastaba lo blanco de tu camisa en tu piel morena. Recuerdo como lo veía desde arriba, con la quijada cercana, tratando de escuchar algo en medio del bullicio, procurando mantener los talones pegados al suelo.
Recuerdo que fuiste tú quien incitó. Recuerdo que al notarte no dudé.
Y también que en medio del baile te besé, te habías acercado lo suficiente. Suficiente como para que el mayor de los tímidos notara, o el mas negado supiese que eras tú la que me besaba a mi.

En algún momento te tomé de la mano buscando sacarnos de miradas celosas, hacia el cuarto de al lado... Y luego,





















tus besos.





















Te muerdo; me dices, -me estás mordiendo-






Sonrío y te beso. Y te beso.










Me gusta, porque eres suave, porque son suaves tus labios. Porque te siento la falta de miedo, porque se que te estás riendo, porque no te molesta mi mano quieta, tampoco la inquieta. Porque tu tela se hizo más delgada y porque tu sudor es discreto. Porque tienes escote.

Y nos interrumpieron.











































En el cuarto de atrás. De nuevo.


Esta vez voy más agresivo, ya demostraste querer seguir. Aun no te escucho gritar, creo escucharte algún sonido.
Te sigo besando, y sigo. Y ahora no te molestan los mordiscos, ahora te tengo en mis manos, ahora te tengo a punto


-Malo, estás rascao- me detienes y empujas.
-No estoy rascao- te digo entre risas.

No lo estaba.





















Y al final, fue así como lo describiste:
"ese día fue fino.... lástima q te rascaste..."
Pero es como lo acabo de escribir, como lo describo yo.

Recuerdas, pequeña?