
Estoy que no aguanto a llegar a la casa y prenderla de nuevo.
Hoy pude distraerme bastante en la mañana con el proyecto que me asignaron ayer. Hasta me divertí... Lo que hizo que las cuatro o cinco primeras horas del día pasaran velozmente. Hasta que llegó la tarde y mi mente lo notó...
Es como cuando la vejiga sabe que el baño esta a corta distancia...
Me siento acalorado, cuando cuento los minutos desespero. Me cuesta no ver el reloj, a pesar de que no quiero verlo. No me convenzo. No sé qué hacer. El tiempo... La adicción, el deseo y el tiempo.
¡¡Otro tema!!
¡Las trompetas están sonando!
xD
Hoy pensaba cómo rápidamente pasan las semanas. Hoy cumplo mi sexta en experiencia ingenieril neoyorquina.
En el fondo de todos estos días lo que más me emociona es la fecha de regreso, por lo que esta alta velocidad de los días no me disgusta. Pero hoy almorzando me di cuenta que todos los recuerdos y vivencias venezolanas reposan detrás de esta experiencia, en medio de los pensamientos que surgen en esta carrera posterior, más actual que ellos.
Por querer correr tan rápido a ese reencuentro estoy alejándome a mucha velocidad de todas esas cosas que aún no libero. Hay recuerdos que aún no están listos para formar parte de esa acogedora y lejana memoria; los tengo en mi cariño afectando mi cotidianidad y usándolos de ejemplo en cuestiones diarias, todavía.
No recuerdo cuando dejé de caminar a MEM para caminar al "Main Building".
Sí lo recuerdo. Pero no quiero.
Y son estas letras, como se empieza a volver usual, las que regulan mi respiración y hacen de mis asfixias sensaciones levitantes de lentos palpitares.
Hoy el Club de la Serpiente tomará vino. Y Deb me dijo que siempre estoy yo también.
Hoy vino
y más tarde, se fue.
Pero siempre la consigo...
¡Alegría! xD!! xD! xD!!! xD!! xD!!!
Te amo.
ResponderEliminarLo sabías, pero decirlo también vale.